Nadie puede con el record de Q*bert!

14 de noviembre de 2011
Casi veinte años después, uno de los juegos más adictivos de todos los tiempos mantiene su record intacto. La pasada semana tuvo lugar la tercer maratón para intentarlo, pero aun nadie pudo superar la marca de 33 millones de puntos que impuso Rob Gerhardt en 1983. Enterate qué pasó en cada uno de estos fallidos intentos.


Q*bert es un juego de puzzle bastante adictivo en el que el jugador controla a un extraño personaje que debe saltar por todos los cubos de la pantalla a fin de colorearlos, mientras escapa de varios enemigos que intentan hacerle a uno la vida imposible.
El planteamiento del juego, como sucede con muchos de antaño, es simple pero enormemente adictivo. A diferencia de las versiones actuales, el original Q*bert se controla solamente con el direccional, y ningún otro botón está involucrado (no es necesario).
Desde su primera aparición en Arcades (máquinas grandes) en 1982, Q*bert ha producido afición. Además, fue uno de los primeros juegos que provocó maratones en las que cientos de personas se reunían para ver quién hacía un mayor record de puntajes.
En una de estas maratones, en 1983, Rob Gerhardt estableció una marca de 33.273.520 puntos. Hoy, muchos tratan de derribar esa marca, pero sin éxito. El último intento se dio el sábado 12 de noviembre, cuando Rick Carter falló por poco, acercándose a los 28 millones de puntos, después de increíbles 59 horas de juego seguido.
Como bien comentan en la web Kotaku (de donde rescatamos esta información), en Q*bert no existe lugar de la pantalla en donde dejar al personaje parado como para hacer una pausa y descansar un momento. Por esta razón, las maratones de Q*bert son matadoras, obligando a los competidores a realizar esfuerzos sobrehumanos para destronar el record de 1983.
Además del último intento de Carter, en mayo de este año, George Leutz hizo lo suyo, pero sucumbió al cansancio después de 54 horas de juego. Lutz marcó 24,7 millones de puntos, pero estuvo lejos del record de Gerhardt.
Pero peor fue el caso del mismo Lutz cuando un mes antes, en abril de este año, había iniciado una maratónica partida que terminaría de la peor manera. Luego de 36 horas de juego, habiendo alcanzado unos 16,8 millones de puntos, alguien accidentalmente pateó un enchufe y desconectó el Arcade en el que Lutz jugaba al Q*bert. Por supuesto, la máquina se reseteo y el puntaje se perdió por completo.
Historias tristes las de las intentonas por acceder al record de Q*bert. Por ahora, parece que los fanáticos tendrán que dedicar un poco más, para alcanzar un record que, según los expertos, no se puede superar con menos de 70 horas de juego. Casi nada.

JUGAR AL Q*BERT